CÓMO DISFRUTAR DE UNA PISCINA PRIVADA EN AGOSTO EN SEIS COMPLICADOS PASOS

Paso 1- Construye una piscina. Si tienes la suerte de que tus abuelos construyeron una hace 48 años, eso que te ahorras. La parte mala es que tú piscina tendrá muchos años. 48, en concreto

 

Paso 2- Llénala de agua. Esto puede parecer sencillo. Pero no, después de 48 años, nada es sencillo. Seguramente pasará alguna, o todas, estas cosas:

-   El encargado del pozo que suministra el agua te vacila y te la manda cuando le da la gana. Suele ser cuando estás comiendo o a punto de irte a misa

-     A medida que el agua entra por un conducto se va vaciando por Dios sabe dónde

-     El caudal que entra es mínimo y, sospechosamente, a tu vecino se le está llenando la piscina por la cara

-    La piscina rebosa agua y tú casi pierdes la vida ahogada sumergiéndote para quitar y más tarde poner un tapón de piedra que pesa un quintal y me estoy dando cuenta de que esto es demasiado largo y penoso y seguramente os la pela y es que esto hay que verlo pa creerlo

Una vez te has resignado a tu suerte y decides que salga el sol por Antequera, pasan unas dos horas y tienes tu piscina llena y lista para usar. Si no te asusta el agua helada

 

Paso 3. Disfruta de la piscina. Para esto puedes hacer uso de colchonetas, pelotas, almohadillas de Sport Billy, flotadores con cabeza de pato, sillones con apoyavasos, cocodrilos, caballos y orugas hinchables, toboganes o algún detalle cani como un neumático. O simplemente puedes nadar. Date prisa porque seguramente en dos días se habrá vaciado la mitad de la piscina. Misteriosamente. Muy misteriosamente

 

Paso 4- Ensucia la piscina. Aquí no tienes que hacer nada. A ver, podrías, pero no te lo aconsejo. De ensuciar se encargarán la naturaleza, los bichos y el tiempo. El resultado es un bonito engrudo susceptible de transmitir el tifus

 

Paso 5- Limpia la piscina. En este paso no sé si reír o llorar. No, qué narices, claro que lo sé. No me estoy riendo. ¿Cómo andas de la espalda? Lo de aspirar salfumant, ¿bien? ¿Eres escrupuloso? ¿El olor a abono es tu preferido? ¿No te importa que se te suban bichos por el cuerpo? ¿Tienes claustrofobia? Si pillas por dónde va el asunto y te atreves, el año que viene te espero

 

Paso 6- Repite los pasos 2, 3, 4 y 5 tantas veces como sea necesario y el cuerpo aguante. Mis abuelos nos hicieron un fenomenal regalo que nos ha dado grandes momentos. Y se pasa por lo que haya que pasar