VOLANDO VOY

Voy a coger un avión. Estoy nerviosa. Voy a hacer lo mismo que el perrito negro. No sé si volveré. De hecho, nunca sé si volveré, pero hoy, menos. Mi hermana, toda despreocupada ella, me mandó un correo con las cosas que uno puede hacer para salvar su vida en caso de accidente de avión. Lo leí, sí…, pero se me han olvidado todas. Así que si se da la circunstancia, sólo voy a hacer dos: rezar y esperar a Supermán.

¿Alguno se ha preguntado dónde está el perrito negro? Niños y animales. Un filón

XE QUE BO

Y peim

LA MADRE QUE PARIÓ A LA CIENCIA

No hay fiesta mejor que las fallas. Lo dije el año pasado y lo mantengo. En ninguna otra parte del mundo encontraréis algo como esto. Pero también os digo que somos muchos los que, además de disfrutar de las fallas, las sufrimos.

Que tengamos paciencia, nos dicen. Que sólo son unos días al año. Veamos:

Tratar de llegar a tu casa a 2 por hora porque llevas delante a 80 falleros bailando y cantando al son de Paquito el Chocolatero tocado por la correspondiente banda. Paciencia

No tener manera de llegar a una estación de tren porque los autobuses no pasan y las muletas y las caminatas siguen sin llevarse bien. Paciencia

No poder pegar ojo porque debajo de tu casa se monta una verbena hasta las 4 de la madrugada. Si estás enfermo, te aguantas. Si tienes niños pequeños, te aguantas. O también puedes bajar a bailar. Paciencia

Sufrir las calles cortadas desde varios días antes de que empiecen las fallas. Tienes que llegar al trabajo, a un hospital, a tu casa, tus hijos aún tienen colegio. Necesitas continuar con tu rutina pero te ponen obstáculos. Paciencia

Tener la mala suerte de que tiren los castillos de fuegos artificiales enfrente de tu casa. Si no te gusta que tu cama retumbe ni te apetece estar pendiente de en qué momento se te caerá un cuadro encima de la cabeza, mejor acuéstate cuando todo haya terminado. Paciencia

No poder pasear con calma por la calle si no eres del bando “petardos y bombazos”. No poder ver fallas con tranquilidad y sin que a cada segundo pongan a prueba tu corazón y tus tímpanos. Paciencia

Está bien. Tengo paciencia. Mucha gente no puede escaparse de la ciudad estos días, así que somos muchos los que tenemos paciencia. Pero también me pregunto, ¿cuándo llegará la paciencia para los que nunca molestamos a nadie?

 

LA RARA

Estoy harta de tener que justificarme. Harta de la gente cuadriculada. De los que no son capaces de ver más allá de sus narices. De los que, sin conocerme, me dicen lo que tengo que hacer. Y me llaman rara. Soy rara porque no vivo como ellos. Porque no actúo como ellos. Porque no hago lo que “toca”.

 

No me interesa tu vida. Ni se me ocurriría decirte cómo tienes que vivirla. Has hecho lo que se esperaba de ti. Enhorabuena. Pero no tienes nada que ver conmigo. ¿Me conoces? ¿Me conoces de verdad? ¿Me tienes cariño? ¿Me quieres? Pues te callas. Y no me trates con condescendencia. No soy gilipollas.

 

Muchas personas podrán darme lecciones, pero yo elijo de quién quiero aprender

 

THAT´S ENTERTAINMENT

Hoy toca comentar los Oscar. Naaaa…. , buscad algo por internet que yo paso.

Por cierto, Leo y yo igualicos, si no fuera por un pequeño detalle: que las penas con pan son menos. Y él es multimuchimillonario y desde ayer se habrá ligado por lo menos a tres supermodelos. Yo… el pan del desayuno y poco más.

Aquí mi suegra. Nos queremos mucho

Ellen Page. Como ha anunciado que es lesbiana, va y se viste de hombre

No sé por qué, siempre que veo a estas tres pienso en la mujer barbuda. La de dos metros me recuerda a una tía que yo tenía y que nunca más se supo

 

El de la izquierda viene a ser el Paquirrín australiano. Y me recuerda a un cojo que yo tenía y que nunca más se supo

Los Goya jamás conseguirán ser los Oscar, pero me estoy empezando a temer que llegará un día en que los Oscar degeneren en los Goya. No sé, a lo mejor ese día a Leíto le echan algo

 

CORAZÓN, CEREBRO Y VALOR

Hoy es la noche de los Oscar. A ver, en realidad allí creo que es tarde-noche, y aquí madrugada, así que, haciendo la media, pues es la noche.

A la espera de modelitos que comentar y muchachada que poner a caer de un burro (desde el cariño, por Dios, que no estamos en los Goya), os dejo con mi particular cena post-Oscar. Como yo no suelo cenar a las 8 de la mañana, esta cena es pre-Oscar. Mirad si será pre, que la hice hace dos semanas…

Y todo buenísimo, oiga. Que yo no sabré hacer una paella, pero freír, lo que es freír… Mirad, yo me merezco dos Oscar. El de Mejor Fritura y el de Mejor Decoración de Mesa con Dos Duros y sin Tener ni Puñetera Idea de Nada en Esta Vida. No. Me merezco bastantes más. Y llegará el día, como espero que pase hoy con Leonardo DiCaprio, en que se me reconocerá. Y eso

Somewhere over the rainbow

Skies are blue

And the dreams that you dare to dream

Really do come true

Somewhere over the rainbow

Bluebirds fly

Birds fly over the rainbow

Why then, oh why can´t I?