NUNCA NEGATIVO

Hoy he visto “El lado bueno de las cosas”. Literalmente, porque he visto una película que se titula así. En cuanto a lo otro, ¿es verdad que todas las cosas que, a simple vista, nos parecen malas, tienen un lado bueno? Creo que todas no, hay cosas que son malas las mires por donde las mires. Si los que lo afirman se refieren a que, incluso de lo malo que nos pueda pasar, se puede sacar una enseñanza, sí, puede ser. Pero no creo que yo sea tan optimista como para llamar a eso “lado bueno”. Otras veces, la parte positiva es indudable hasta para los más realistas, ¿pero prevalece sobre la negativa? También hay quien se empeña en sacar el lado malo a todo, aunque no lo tenga. Al fin y al cabo, como en casi todo, es cuestión de actitud. Si quieres ver la parte positiva, la verás. Aunque sólo sea por la cuenta que te trae. Y la actitud se puede cambiar. Incluso la forma de ser se puede cambiar. Porque hay actitudes y caracteres que nos entorpecen la existencia, o la entorpecen a los que más queremos. No vale con decir “yo soy así”. Excusa barata que se esgrime para justificar cualquier comportamiento. ¿Qué tú eres así? ¿Y eso qué coño quiere decir? ¿Que eres así de egoísta? ¿Así de irresponsable? ¿O así de gilipollas integral? No, bonico, no. Quien tenga dos dedos de frente y 100 gramos de corazón siempre querrá mejorar. Ser mejor persona, mejor madre, mejor hijo, mejor marido, mejor trabajador o mejor amiga. Porque la vida ya es bastante dura para que vengamos nosotros a fastidiarla más. Y ver el lado bueno de las cosas es un buen comienzo. Al protagonista de la peli le funciona